Las esperanzas de solución de los graves problemas en algunas de las infraestructuras del campus de Leioa se basa en estos momentos en dos iniciativas: una, el plan plurianual de inversiones, más cercano en el tiempo, y dos, el plan director de la reforma del campus, de materialización más tardía. El primero, que sustituirá al concluir este año, permitirá, mediante un acuerdo con el Gobierno vasco, la financiación durante los próximos años de obras que la UPV considera prioritarias.
El equipo rectoral está recabando las demandas de todos los centros para redactar la memoria de necesidades de la institución que servirá de base para la negociación con el Ejecutivo autónomo. En esta memoria, es más que probable que las actuaciones en el mayor campus de la UPV tengan una posición relevante, aunque el rector, Juan Ignacio Pérez, ha querido dejar claro que no olvidan otras prioridades. "No sólo nos preocupa Leioa. Hay también otras carencias que debemos atender", señala.
De cualquier modo, Pérez pronostica una memoria "realista" que va a procurar no escatimar medios. "Aunque sea necesario más tiempo, las reformas y obras que se acometan se llevarán a cabo con las mayores garantías, para evitar así tener pan para hoy y hambre para mañana", justifica.
En cuanto al plan director, un proyecto de modificación de la estructura y apariencia del actual campus promovido por el anterior equipo, el rector ha mostrado su interés por él. "Debemos ver cómo compaginar las obras que recoge el plan con la rehabilitación de edificios como los de Ciencias Sociales y Medicina".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de noviembre de 2004