Después de tres años de intensas conversaciones con el Gobierno de India, el Festival de Marionetas de Tolosa, que se celebra desde hoy y hasta el 5 de diciembre, dedicará este año su sección especial al país asiático, que cuenta con una tradición de títeres de gran valor técnico, escénico y etnográfico.
Ese buen hacer se puede comprobar en la exposición Putul Jatra, que reúne en el Palacio Aranburu 300 marionetas, objetos e instrumentos musicales originarios de tres estados del subcontinente pertenecientes ahora a la Academia Nacional para la Música, la Danza y el Teatro.
El programa de la 22ª edición del Titirijai recoge la actuación de 25 compañías de diez países, que presentan a lo largo de nueve días 28 espectáculos, seis de ellos dirigidos al público adulto y, el resto, a los niños. La India, por supuesto, es el país protagonista, con cuatro grupos y cinco obras. Fiesta en el Raj-hastan se presenta como el trabajo estrella. La compañía Pitara Putli moverá los hilos cada tarde todo el festival en el frontón Beotibar.
El resto de los invitados de aquel país son igualmente "ejemplos de la riqueza de la tradición de marionetas" indias. "La selección es geográficamente amplia y técnicamente representativa", al tiempo que combina "expresiones antiguas y contemporáneas", destaca Miguel Arretxe, codirector del Titirijai.
Holanda visita por primera vez el festival tolosarra. Y lo hace con El bosque de Bubbel y Babbel, un espectáculo infantil al que la compañía dirigida por Damiet Van Dalsum da vida con marionetas de papel.
Aunque el programa del Titirijai incluye cuentos clásicos como Caperucita Roja o El gato con botas, la muestra se atreve esta edición con asuntos más comprometidos. El grupo mexicano Marionetas de la Esquina desembarca en Tolosa con Dibújame una vaca, que trata la vivencia de un niño a raíz de la separación de sus padres. Y la compañía segoviana Títeres de María Parrato aborda la muerte en su montaje No te asuste mi nombre.
Euskadi está representada por cuatro grupos que llevan a escena cinco obras. Entre ellos están los artistas del centro Asvinenea, que estrenan Farsantres, tres farsas escritas por Alfonso Zurro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 27 de noviembre de 2004