La montaña mágica de Montjuïc se convirtió ayer en el hervidero atlético de Barcelona. Más de 4.000 corredores, desde niños hasta profesionales, pasando por atletas discapacitados, se reunieron en torno a Montjuïc con ocasión de la 81ª edición de la tradicional carrera Jean Bouin. Todos participaron, pero los focos los concentró el eritreo Zersenay Tadesse, medalla de bronce en los 10.000 metros en los pasados Juegos de Atenas y vencedor, como el año pasado, de la prueba masculina con un tiempo de 27m 30s. En categoría femenina, el triunfo se lo llevó una debutante, la portuguesa Jessica Augusto, que completó los 6,4 kilómetros en 21m 27s. Los primeros españoles fueron el también olímpico José Ríos (cuarto) y Natalia Rodríguez (quinta), también finalista en Atenas.- N. R.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 29 de noviembre de 2004