El director de la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN), Mauro de Lima e Silva, afirmó que el Gobierno brasileño debe abrir los archivos secretos de los tiempos de la dictadura (1964-1985) para "lavar la ropa sucia" y "comenzar de nuevo".
En una entrevista con el diario Folha de São Paulo, Lima e Silva, que asumió el cargo a mediados de este año, dijo que está dispuesto a revelar el contenido de millones de documentos que están en poder de distintos estamentos militares y fueron "clasificados" hace dos décadas.
Esa apertura permitirá "cerrar la historia" y "las heridas que aún no cicatrizan". El último debate público sobre la represión en la dictadura se abrió hace un par de meses, a raíz de la publicación de unas fotos de un hombre desnudo en lo que parece ser una cárcel, que fue confundido con el periodista Vladímir Herzog, asesinado en 1975 en una prisión del Ejército. Según Silva e Lima, existen tres grandes archivos, pertenecientes a organismos de represión desactivados tras la dictadura.
Los grupos de derechos humanos piden que se haga público uno de ellos, los archivos del Servicio Nacional de Informaciones (SNI), coordinador y ejecutor de la mayor parte de las acciones represivas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 6 de diciembre de 2004