Un apoyo más para Madrid 2012. El equipo español de tenis ganador, por segunda vez, de la Copa Davis dejó ayer depositada en Madrid la Ensaladera, que poseerá durante un año. Tras la polémica suscitada por haber preferido la federación española disputar en Sevilla la final, contra Estados Unidos, lo que pudo perjudicar la imagen de la candidatura olímpica de la capital a los Juegos de 2012, el gesto restaña supuestas heridas y confirma que sólo cuestiones técnicas y tácticas, como la menor altura de la ciudad andaluza, influyeron en la elección. Y la decisión, junto con la pista de tierra batida, que hizo el juego aún más lento, se demostró acertada.
Los tenistas, que fueron recibidos por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y por la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, brindaron con cava en la Ensaladera y recibieron el cariño de los madrileños, a quienes ofrecieron el trofeo en la plaza de la Villa y la Puerta del Sol.
Nadie se acordó ya del desencanto de que Madrid no fuese la sede de la final. Lo importante es que Carlos Moyà, Rafael Nadal, Juan Carlos Ferrero y Tommy Robredo ganaron y que existe unidad por Madrid 2012.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 8 de diciembre de 2004