La productividad de las empresas en Estados Unidos creció más lenta de lo esperado durante el tercer trimestre, a un ritmo del 1,8%, según los datos del Departamento de Empleo. Es la tasa más baja desde el último trimestre de 2002, lo que hace entrever una posible recuperación del lado de la contratación. Pero Wall Street esperaba una revisión al alza del dato hasta el 2%, para acercarlo más al 3,9% registrado durante la primavera.
El dato preliminar publicado por el Gobierno hace un mes fijó la tasa de productividad en el 1,9%. Los economistas consideran, tras analizar la revisión a la baja, que las compañías estadounidenses han llegado a un punto en el que deben tirar más del lado de la contratación para atender a la demanda interna, porque ya han llegado muy lejos con lo que sus plantillas pueden dar de sí.
Sin embargo, del lado de los costes laborales, el incremento fue del 1,8%, dos décimas mayor de lo previsto, lo que puede frenar la creación de nuevos puestos de trabajo. Este indicador es además uno de los más seguidos por la Reserva Federal (Fed, el banco central) y refuerza la idea de que la próxima semana se decidirá una nueva subida de tipos en EE UU, para cerrar el año en el 2,25%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 8 de diciembre de 2004