Siempre se dice que la educación es una inversión a largo plazo, y es que es muy cierto. En España estamos en una situación crítica a este respecto, ya que hemos cometido el error gravísimo de creer que para disminuir el fracaso escolar la solución es bajar el nivel educativo. Este gravísimo error costará mucho reconducirlo, dado que ya hay una generación completa que apenas ha perfeccionado su nivel cognitivo y cultural, de forma que nuestro país va a sufrir un retroceso generacional en lo tocante a sus recursos humanos. Estos asuntos son demasiado importantes para dejarlos en manos de los políticos. Si cada vez que cambia el Gobierno cambia el sistema educativo, pues no vamos a ningún sitio, como en tantas otras cosas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 10 de diciembre de 2004