La comisión de investigación del Prestige se creó en diciembre de 2002 y tuvo cuatro tormentosos meses de vida, sin apenas resultados. El Gobierno de José María Aznar acogió con desagrado que el PP de Galicia la aceptase. Prohibió que cargos y empleados de la Administración central compareciesen en el Parlamento gallego y se negó a entregar ningún documento. Ante esa actitud, PSOE y BNG abandonaron temporalmente la comisión y el PP optó por disolverla.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 11 de diciembre de 2004