Dos artefactos de fabricación casera explotaron la pasada madrugada de manera casi simultánea en el exterior de sendas empresas ubicadas en las localidades guipuzcoanas de Usurbil y Ormaiztegi. También de noche fue atacado el batzoki (sede del PNV) en Abendaño (Álava). El Gobierno vasco condenó ayer los tres atentados, que atribuyó a ETA.
Las explosiones contra las dos compañías se produjeron hacia las 2.30 y no causaron heridos, aunque sí daños materiales, según informó el Departamento de Interior. La puerta de la empresa de Usurbil fue reventada por efecto de la deflagración y, en el caso de Ormaiztegi, además de desperfectos en la entrada, se vieron afectadas una cristalera y varias ventanas.
El Ejecutivo vasco expresó ayer su repulsa por estos atentados cometidos "sin previo aviso" y consideró que "las destrucciones de empresas no sólo afectan a los empresarios sino a todos los trabajadores que trabajan en ellas" e impiden "el progreso económico y social de muchas familias". Estas acciones terroristas, asegura en un comunicado, "alteran la convivencia pacífica y democrática y el normal funcionamiento de la actividad económica y social que permite a los ciudadanos vivir y prosperar".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 13 de diciembre de 2004