Se suele decir que aquellas personas que hemos estado obligados a pasar nuestra vida como emigrantes fuera de nuestra tierra amamos y consideramos mucho más nuestras cosas que aquellos que siempre las han disfrutado. Dice la Biblia que Dios castigo con ira a los hombres de la Torre de Babel confundiendo sus leguas. Al PP confundiendo sus ideas.
Adoro mi tierra, amo sus gentes y respeto profundamente nuestra cultura y su lengua. Por ello no consigo comprender el conflicto que ha creado precisamente el PP sobre la lengua. Si algún partido político se ha evidenciado por no potenciar la lengua ha sido el PP del País Valenciano. Sus precedentes son claros, un presidente, Zaplana, que ni lo habla ni lo traga, un cabeza de lista por Alicante, Trillo, que ya me dirán lo que tiene de Valenciano. Ni una sola intervención de los diputados populares en las Cortes Valencianas se hace en esta lengua. Gran cantidad de ciudadanos han llegado a creer que pusieron a Camps para la presidencia de la Comunidad solamente por hablar valenciano, ya que su falta de liderazgo evidenciada por su propio partido lo inutiliza para esa labor. Por favor señores del PP, no son precisamente ustedes los más adecuados para crear el conflicto de la lengua.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 16 de diciembre de 2004