Queremos manifestar la total y absoluta disconformidad con las afirmaciones que aparecieron en el artículo de su diario el día 15 de diciembre, en las que se asegura que "los niños/as quedan solos/as en el aula cuando la profesora tiene que acompañar al alumnado que desea ir a los aseos que están en el edificio central del colegio".
Es cierto que a raíz del deterioro sufrido en los aseos, éstos han quedado totalmente inutilizados y hay que trasladar el alumnado de 3 y 4 años a los que están ubicados en el edificio del centro, y conlleva una distorsión en la dinámica de trabajo, ya que de las dos profesoras que están en las aulas prefabricadas una debe salir y la otra se queda a cargo de vigilar al resto del alumnado. Al tener profesorado de apoyo en el nivel de Infantil hemos organizado en todo momento la disponibilidad de una persona para que pueda llevar de vuelta a los alumnos una vez han satisfecho sus necesidades.
Evidentemente toda esta situación ha repercutido enormemente en el desempeño general de nuestras funciones, agravada lógicamente por la climatología de estos días, resultando ya insostenible. N
ecesitamos urgentemente una respuesta de la Administración que subsane las deficiencias que está padeciendo nuestro alumnado debido a una infraestructura obsoleta y totalmente alejada a las necesidades que debe cubrir una Escuela Infantil, y que durante tanto tiempo hemos estado reivindicando. Sin embargo todo ello no ha significado en ningún momento alguna actuación que haya ido en detrimento de la seguridad y vigilancia total de nuestro alumnado, y afirmar lo contrario, como han hecho en su periódico, supone una vejación de nuestra actuación como docentes, es un ataque directo a nuestra profesionalidad y crea una alarma sobre un hecho que no responde en absoluto a la realidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 17 de diciembre de 2004