- 1. "Sí se produjeron fallos gravísimos y luego una clara ausencia de actuación o de no hacer caso a la alarma que suscitan los avisos anteriores y definitivos, como el atentado de Casablanca. Ahí no salta la alarma, y luego hay que hablar de la falta de conocimiento, que a mí me parece fundamental, en el caso de los robos de explosivos. Casablanca y la sustracción de la dinamita son datos bien definitorios de qué es lo que ocurrió. Y esos fallos pueden constituir una imprevisión".
- 2. "Parece meridianamente claro que ese tan cacareado por el Gobierno 'que la información se daba en tiempo real', no se correspondía en absoluto ni con la investigación policial, ni con los datos que se tenían. Desde luego hubo engaño. O bien los mandos policiales hurtaron información, cosa que dudo, o bien hubo autoengaño porque se quería mirar a una línea de investigación que no existía; o bien se engañó a la sociedad".
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- 3. "El objeto de la comisión no es establecer las responsabilidades penales, pero está clarísimo que la investigación policial y judicial arroja que los únicos datos claros apuntan a la pista islamista. Los datos son claros. De personas del entorno policial y judicial, quiero recordar, sólo dos han hablado de conexiones entre ETA y el islamismo, que fueron [el fiscal Eduardo] Fungairiño y [el ex director de la Policía Agustín] Díaz de Mera. El resto han negado cualquier vinculación".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 20 de diciembre de 2004