En una tarde de ambiente gélido se desarrolló el festejo más peligroso de la temporada, por culpa del pésimo encierro de Brito. Además de descompuestos, los ejemplares desarrollaron sentido y derrotaron por culpa del viento que movía los engaños. Lo más emocionante de la corrida fueron los vistosos segundos tercios en los que en algunos de los matadores-banderilleros invitaron a sus alternantes.Juan José Padilla, con decisión, metió a la bayeta al rebrincón primero, que tenía medio viaje, y le dio tandas de aceptables redondos. Con el chico y andarín cuarto se lució con los garapullos destacando por su precisión el último par al violín. Al lidiar al abanto y tardo segundo, El Zapata toreó con valor, pero desafortunadamente carece de gusto. Fermín Spínola destacó con los palitroques en el segundo dándole todas las ventajas al morlaco y asomándose al balcón.
Brito / Padilla, El Zapata, Spínola
Toros de Brito: hechos salvo el 4º, pobres de cabeza; descastados, mansos y ásperos, pitados en el arrastre. Juan José Padilla: estocada desprendida -aviso- y descabello (palmas); estocada (silencio). El Zapata: estocada tendida -aviso- y tres descabellos (al tercio); dos pinchazos hondos y descabello (pitos). Fermín Spínola: estocada delantera (silencio); estocada tendida (silencio). Monumental Plaza de México, 19 de diciembre, séptima corrida de la temporada. Mala entrada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 21 de diciembre de 2004