La Delegación de Salud de la Junta de Andalucía en Cádiz confirmó ayer que el brote de gastroenteritis declarado la semana pasada en el geriátrico Lago de Arcos y que provocó la muerte de dos ancianos y la intoxicación de más de 80 fue originado por un virus común conocido como Norwalk.
Así se desprende del estudio epidemiológico realizado por el personal del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y de los análisis de alimentos, agua y heces encargados al Centro Nacional de Microbiología del Instituto Carlos III de Majadahonda (Madrid).
El director del distrito sanitario Sierra de Cádiz, Antonio Mansilla, confirmó que este virus es "muy normal" en la época del año en la que nos encontramos y que su transmisión se produce "de persona a persona", por lo que hay que descartar cualquier responsabilidad del centro en el que se encontraban ingresados los fallecidos.
Según la nota oficial remitida por la Junta de Andalucía, "el Norwalk pertenece a un grupo de pequeños virus responsables de brotes de gastroenteritis que surgen esporádicamente en instituciones cerradas". Asimismo, se trata de una afección leve o moderada que no suele provocar complicaciones, excepto en el caso de enfermos crónicos o debilitados, o en personas de avanzada edad, como ocurrió con los internos de la residencia, cuya media de edad era superior a 80 años. El SAS recuerda que para el control de estos brotes es muy importante intensificar medidas higiénicas como el lavado correcto de las manos y la ropa, la limpieza adecuada del instrumental y el uso de mascarillas.
Las autoridades sanitarias indicaron que la enfermedad "está remitiendo" y que, hasta el día de ayer, un total de 67 ancianos habían sufrido vómitos, diarreas, dolores intestinales y, en algunos casos, fiebre. Cuatro de los infectados se encuentran aún hospitalizados en centros de Jerez y Villamartín, aunque su evolución es favorable.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 22 de diciembre de 2004