El ministro de Defensa, José Bono, fiel a las costumbres navideñas, ha felicitado al presidente José Luis Rodríguez Zapatero y a sus compañeros de Gabinete con un regalo singular: un soldadito de plomo. Se trata de la reproducción de una miniatura que data de 1906 y que representa a un cadete abanderado perteneciente a la Academia de Toledo. La nuevas miniaturas han sido debidamente actualizadas ya que portan la bandera constitucional y no la que empleaban los soldados españoles a principios del siglo pasado. El ministro tampoco se ha olvidado de la prensa en fechas tan señaladas y en su felicitación navideña hace gala de su erudición y de su sentir cristiano. Ha enviado pequeñas campanas de metal acompañadas de una nota. No se trata de una llamada al orden. "Las campanas", explica el ministro en su misiva, "han sido a lo largo de la historia un singular medio de comunicación. Su sonido fue una compañía permanente de los hombres (toque de alba, el de alzar a Dios, toque del Angelus, toque de queda, toque de ánimas...). Se llegaba a afirmar que una comunidad alcanzaba hasta allá donde llegaban sus ecos". El ministro considera que hoy las campanas no son indispensables para construir y marcar el tiempo, "pero son necesarias para transmitir emociones y son útiles para dejar memoria de acontecimientos o sentencias que quedan inscritas en las mismas". La campana enviada por el ministro tiene marcado un consejo: "Si quieres la paz, trabaja por la justicia". El ministro aclara que es una frase del papa Pablo VI "que ojalá sepamos grabar también en nuestro corazón".-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 24 de diciembre de 2004