Da la impresión de que el director general de Telemadrid vive en un mundo al revés en el que el responsable de una empresa que va a pique en lugar de explicar su mala gestión lanza críticas a otras empresas. Es decir, hace política. Y a lo peor ése era el objetivo de Esperanza Aguirre cuando nombró a su jefe de prensa como director de la televisión autonómica. Tesis avalada por algunas actuaciones, como que, en la batalla interna en el PP entre Esperanza Aguirre y Ruiz-Gallardón, el señor Soriano se haya decantado pública y notoriamente por la primera. O que este lunes por la tarde, cuando Esperanza Aguirre anunció su crisis de Gobierno, se censuraran las declaraciones del secretario general del PSM-PSOE, Rafael Simancas. Ejemplos hay muchos, a diario.
Señor Soriano, ninguno de sus antecesores, ya sean "socialistas" como usted dice o "populares", han gestionado tan mal. Los datos de audiencia son desastrosos, usted continúa haciendo contratos millonarios a sus afines o a productoras propiedad de ex ministros o cargos con el PP y las cuentas dan niveles alarmantes de endeudamiento y desviación en el gasto. Espero que no tengamos problemas en un futuro próximo.
Señor Soriano, ocúpese un poquito más de Telemadrid y deje la política sectárea. Los ciudadanos son inteligentes y cuando un dedo señala la luna miran la luna, no su dedo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 26 de diciembre de 2004