Agradecería que alguien nos informara de las ventajas o desventajas reales, como ciudadano de a pie, de la Constitución europea, porque la verdad es que estoy más informado sobre el plan Ibarretxe que acerca de la Constitución, que teóricamente votaremos todos.
Porque si se pretende informarnos gracias a los mensajes que recibimos de los personajes dedicados a este menester -Johan Cruyff, Butragueño o Luis del Olmo, desde mi punto de vista ninguno de ellos con saberes merecedores de avalar su opinión-, lo que realmente se crea, al menos para mí, es una cierta confusión y desasosiego, tanto por el comunicador como por el mensaje emitido.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de enero de 2005