El Ayuntamiento de Madrid puso en marcha ayer, ante el anuncio de la llegada de una ola de frío a la península, el Plan Nevada y la Campaña contra el Frío, y recordó que, desde el pasado diciembre, las personas sin techo pueden acudir a cualquiera de las 267 plazas en albergues y 3.500 camas en pensiones que el Consistorio habilitó a principios del invierno. Además, los depósitos municipales tienen listas 6.700 toneladas de sal para hacer frente a las placas de hielo que puedan formarse en las calles.
Los alojamientos públicos para indigentes están en la Casa de Campo y en Carabanchel. En el primer caso existe un centro con capacidad para 75 personas -más 12 camas para casos de intensa demanda-; otro para sin techo en situación crónica, con 30 camas; y un tercero también con 30 plazas. En Carabanchel, el Ayuntamiento ha convertido el velódromo -abandonado desde hace 15 años- en albergue (sólo durante la campaña contra el frío), con capacidad para 120 personas.
Por último, el Consistorio ha contratado 3.500 estancias en pensiones. A ellas serán derivadas las personas "más normalizadas" de entre los sin techo que se alojan habitualmente en el albergue de San Isidro. El coste de todos estos recursos asciende a 908.000 euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de enero de 2005