El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) de Castellón publicaba el pasado 11 de enero el nombramiento, con fecha del día 7, de una asesora de presidencia, lo que eleva a trece el número de asesores en nómina en la institución provincial. La nueva asesora, Amparo Marín Andrés, eleva a 26 los cargos de libre designación que, entre asesores y eventuales, ha contratado hasta ahora el presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra. El también líder del PP de Castellón continúa a la cabeza de los presidentes de Diputación de la Comunidad Valenciana por el volumen de asesores ya que el presidente de la Diputación de Valencia, Fernando Giner, tiene dos asesores y un jefe de gabinete, y el de Alicante, José Joaquín Ripoll, no tiene ninguno bajo la denominación de asesor, aunque cuenta con ocho personas de "apoyo" en presidencia y utiliza otros cargos para su personal de libre designación como el de "director" y "director adjunto" del área de presidencia.
El coste que el personal de libre designación de Carlos Fabra tiene para las arcas públicas se eleva a cerca de 700.000 euros al año, de los que 420.000 corresponden a los 13 asesores. Según dijo ayer el portavoz del grupo socialista en la Diputación, Enrique Navarro, esa cantidad es superior a la que la institución provincial destina al plan de infraestructuras y el plan de electrificación rural juntos, a los que, según el presupuesto para el próximo año, se destinarán 300.000 euros en cada caso.
Entre los asesores y cargos de libre designación de Fabra se encuentran concejales de pequeños municipios, ex alcaldes o antiguos diputados del PP, tanto provinciales como autonómicos, que perciben cerca de 38.000 a 19.000 euros al año. El elenco de puestos eventuales se ha incrementado en cada legislatura presidida por Carlos Fabra. Mientras su antecesor, el socialista Francisco Solsona, contrató a tres personas en 1995, Carlos Fabra nombró a 11 poco después de acceder a la presidencia de la Diputación, desde donde ahora ha elevado a 26 los puestos designados "a dedo". Navarro sostuvo ayer que "los 21 puestos del presidente de la Diputación y los 5 que también tiene a cargo del grupo popular en la institución provincial son un número excesivo", y señaló que "Fabra ya ha llegado al límite", mientras recordó que éste se comprometió en el 95 a reducir el número de asesores y directores generales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de enero de 2005