El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, hizo ayer gala de su europeísmo en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza). Maragall participó en un debate en el que se convirtió en el antagonista del presidente checo, Vaclav Klaus, quien defendió la imposibilidad de profundizar y ampliar a la vez la UE. "Profundizar en la integración no es homogeneizar, sino diversificar", contestó Maragall, que en la imagen aparece junto al ministro turco de Economía, Alí Babacan.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de enero de 2005