Pregunta. El día 7 comienza el proceso de regularización de inmigrantes. En Málaga están un tercio de las oficinas de toda Andalucía. ¿Se espera una avalancha de solicitudes?
Respuesta. No puedo dar cifras, pero es posible que Málaga sea de las provincias donde el proceso tenga mayor repercusión.
P. Málaga es también una de las ciudades a donde se trasladan por avión inmigrantes subsaharianos desde Canarias.
R. Ahora parece que se ha descubierto por parte del Partido Popular, pero esta situación no es nueva, viene desde el año 2002. Desde 2002 hasta el día de hoy, se han trasladado en torno a 2.000 inmigrantes, en su mayoría subsaharianos. No puedo dar cifras, pero la gran mayoría fue trasladada antes de la llegada del Gobierno actual.
P. ¿Se sigue realizando?
R. Algunas veces sí, pero muy pocas veces. Además, el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, acaba de anunciar la aprobación de un protocolo para coordinar los traslados con las comunidades autónomas, y ha asegurado que no se realizarán más sin garantizar antes la acogida y la atención social a este tipo de inmigrante.
P. ¿Cuál ha sido el procedimiento hasta ahora?
R. Se ha seguido haciendo lo que se hacía anteriormente, es decir, sin ponerlo en conocimiento de los ayuntamientos ni de las comunidades autónomas. No se puede devolver a estos inmigrantes a su lugar de origen, porque no se sabe de dónde son o vienen de países sin convenio de devolución. Y no pueden ser detenidos, porque no han cometido ningún delito. Como ya han agotado su periodo de internamiento, se les deja en libertad.
P. ¿Se les hacía alguna vigilancia o seguimiento?
R. No. Pero me he puesto en contacto personalmente con la Cruz Roja para que atienda a estos inmigrantes a su llegada, porque es un tema que me ha afectado, aunque comprendo las circunstancias y comprendo que haya que hacerlo. Cuando llegan, se les toman los datos, se les facilitan medios para que puedan subsistir unos días, se avisa a la Cruz Roja, y se les dan señas de sus centros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 31 de enero de 2005