El viceprimer secretario y portavoz del Partit dels Socialistes (PSC), Miquel Iceta, se mostró ayer contrario a las "mentalidades cerradas", como las que en muchas ocasiones muestran, a su juicio, el PP y CiU, que se oponen a los planes reformistas de Pasqual Maragall, "acostumbradas al habitual mercadeo de apoyo y concesiones entre nacionalistas españoles y periféricos", afirmó .
Pero Iceta también quiso llamar la atención, de forma implícita, sobre quienes se oponen a las tesis del presidente de la Generalitat desde las posiciones más refractarias del PSOE. En el diario digital publicado en su página web, Iceta se refiere a la conferencia pronunciada por Maragall el pasado miércoles en Madrid, en la que se mostró partidario de reformar el artículo segundo de la Constitución, frente a lo expuesto por el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, quien precisó que su partido "no tiene la intención" de modificarlo.
Respecto a la propuesta de Maragall de aprovechar la reforma de la Constitución para distinguir entre nacionalidades y regiones, Iceta dijo: "Los socialistas catalanes no hacemos cuestión sobre si hay que hacerlo modificando el artículo segundo" de la Carta Magna. "Pero de lo que no hay duda es que si en 1978 el consenso fue posible precisamente a través de introducir esta distinción, 27 años después sería absurdo esconder o difuminar aquello que permitió el pacto constitucional", agregó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 31 de enero de 2005