La petrolera Shell anunció ayer un beneficio neto anual récord de 17.590 millones de dólares (13.427 millones de euros) en 2004, un aumento del 38% respecto al año anterior, la mayor cifra obtenida por una compañía del Reino Unido. Los resultados, que equivalen a unos 25 millones de libras (unos 35,1 millones de euros) por día, se han conseguido después de que el grupo se beneficiara de un aumento de los precios del crudo en 2004, que durante semanas superó los 50 dólares por barril.
El anterior récord de una empresa británica lo marcó el banco HSBC, con 7.700 millones de libras (unos 11.550 millones de euros). Debido al incremento del crudo, que en octubre pasado llegó a colocarse en 55 de dólares el barril, la compañía anglo-holandesa ha visto saltar en un 204% sus beneficios en el cuarto trimestre del año hasta los 5.130 millones de dólares (3.916 millones de euros).
"2004 fue un año de extremos, con una reorganización de reservas por un lado e ingresos netos récord y generación de efectivo por otro", dijo el director ejecutivo de Shell, Jeroen van der Veer. Debido a este fuerte incremento de beneficios, la compañía Shell tiene planes para pagar 10.000 millones de dólares (7.633 millones de euros) en dividendos a los accionistas durante el ejercicio 2005.
Se espera que otra compañía petrolera, British Petroleum (BP), también dé a conocer la próxima semana un incremento de sus beneficios, aunque no superará los 25.000 millones de dólares (19.083 millones de euros) registrados por el propietario de Esso, ExxonMobil, de EE UU.
El año pasado, la petrolera Shell tuvo que hacer frente a una importante crisis por corregir a la baja sus reservas de crudo y gas en un 20%, lo que originó la dimisión del entonces presidente Philip Watts y otros directivos.
La corrección en el dato de estimaciones provocó una investigación por parte de los reguladores de Estados Unidos. Los reguladores financieros británico y estadounidense multaron a Shell con 151 millones de dólares (115 millones de euros).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 4 de febrero de 2005