Hace un tiempo escribí una carta sobre la ruina de Majadahonda. Me quedé corta: no eran 15 millones de euros sino 108 millones de euros, como indican en su periódico. Según el nuevo alcalde, el señor Foxá, solamente se deben cuatro millones. Señor alcalde, ni un idiota se cree eso. ¿Tanto escándalo por cuatro millones?
Tengan, usted y su partido, el PP, la vergüenza y la decencia de decir la verdad; han dejado a Majadahonda en la ruina, y lo que es peor, ya no hay terrenos municipales de los que sacar dinero.
Ya empezó el señor Romero de Tejada con su mal hacer, y nos dejó en manos de uno que lo primero que hizo fue comprarse un chalé en la urbanización más cara de Majadahonda (dijo que había heredado), y las calles que se han asfaltado y arreglado han sido las de esa urbanización.
Como el señor Ortega, ex alcalde, dice que no hay más que darse una vuelta por el pueblo y ver lo bien y bonito que está, esta mañana me he dado un paseo por sus calles y he comprobado: papeleras rotas, agujeros por todos los lados, aceras levantadas y a falta de baldosines, mierdas de perros (ellos no tienen la culpa), coches abandonados desde hace años, coches mal aparcados, señales rotas, pasos de peatones muy mal señalizados y escasos, bolsas de basura en las aceras y así un sinfín de desastres. Me ha llamado la atención que ha incrementado mucho las zonas de aparcamiento "vigilado". ¿Por qué será?
Mi urbanización es privada y nos ha hecho pagar ya este año siete euros por utilizar nuestras calles. Somos casi 600 familias, llevamos viviendo 30 años aquí y nunca habíamos visto nada semejante. Además, nos amenazó con que si no pagábamos los siete euros antes de una fecha, nos lo subiría. El señor Foxá ha dicho que habrá austeridad, ¿más? Pobre Majadahonda, de ser un pueblo riquísimo ha pasado a ser el más pobre de la zona noroeste.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 9 de febrero de 2005