El diputado y portavoz socialista en el Ayuntamiento de Cádiz, Rafael Román, no acudió ayer al acto de conciliación previo a la demanda de protección al honor que le interpuso el ex delegado de la Zona Franca Miguel Osuna, del PP, por acusarle de "amparar" las supuestas irregularidades de su antecesor Manuel Rodríguez de Castro al frente del recinto fiscal gaditano. "No acudo porque hay pleno en el Congreso de los Diputados y porque los autores de los escándalos quieren cambiar los papeles y que nos defendamos como si fuéramos culpables los que hemos denunciado esos desmanes", afirmó Román.
PSOE e IU han acusado en reiteradas ocasiones a Osuna y al PP de Cádiz de ser "cómplices" de las irregularidades denunciadas por el Tribunal de Cuentas. Las alegaciones que presentó Osuna a este órgano fiscalizador en defensa de su antecesor, de Rodríguez de Castro, son una "evidencia" para ambos partidos de que Osuna "intentó tapar" estas denuncias y que a la dirección del PP se le cae la estrategia de culpar únicamente a Rodríguez de Castro. A este alto cargo del PP, el Tribunal de Cuentas le exige que devuelva 606.000 euros que carecen de la necesaria justificación.
Se trata de la tercera denuncia de dirigentes populares contra socialistas por la Zona Franca, después de que hace dos semanas dos concejales del PSOE en el Ayuntamiento gaditano y consejeros socialistas en el pleno del recinto fiscal, Carolina Camacho y Francisco Piniella, acudieron al acto de conciliación previo a la querella por supuestos delitos de calumnias e injurias que le interpuso la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, quien también se ha querellado contra el actual delegado José de Mier.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de febrero de 2005