El año pasado hubo 1.200 denuncias de delitos contra la libertad sexual en la Comunidad de Madrid, lo que supone un 20% más que en 2003, según un estudio presentado ayer por la Asociación de Asistencia a Mujeres Violadas, que constata un aumento de los agresores menores de edad, un 6,3% de los autores del delito.
También las víctimas de un 38% de los delitos sexuales cometidos en la Comunidad de Madrid en 2004 eran menores, según refleja el informe. Entre los menores, cometen delitos con más frecuencia los que tienen edades entre los 13 y los 17 años, mientras que entre los adultos, predominan las edades entre 18 y 23 años.
El perfil del agresor es el de un varón, de entre 18 y 36 años, y en la mayor parte de los casos no presentaba estados de drogodependencia o de haber ingerido alcohol. Las víctimas son mayoritariamente mujeres -sólo un 5,5% son hombres- y en un 8,9% de los casos han sufrido más de un delito contra la libertad sexual.
También constata el estudio que un 9,2% de las agresiones se realizan en grupo, una circunstancia "que se produce también entre la población adolescente" y que agrava el estado de la víctima por la carga de violencia añadida, según manifestó la presidenta de la asociación, Tina Alarcón.
La agresión sexual supone el 72% de los delitos contra la libertad sexual, mientras que el abuso alcanza el 29,9. Entre las agresiones, la mitad son violaciones y en un 65% de los casos se producen en lugares como la casa de la víctima o del agresor, porque existe una relación familiar entre ellos o porque se acaban de conocer.
El estudio, que sólo contiene datos de la Comunidad de Madrid, constata que en un 50% de los casos la víctima conoce o tiene alguna relación con el agresor sexual.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de febrero de 2005