El grupo municipal de IU de Madrid aseguró ayer que la Dirección General de Patrimonio Verde admitió en la Comisión de Medio Ambiente que, según sus propios cálculos, la obra de reforma de la M-30 obligará a derribar 8.892 árboles.
La edil Concha Denche, de IU, criticó "la magnitud de esta afectación" y señaló que las previsiones "se quedarán cortas y la tala de árboles será muy superior".
Según Federico Sepúlveda, director de Patrimonio Verde, 2.969 árboles serán trasplantados en una parcela de Moratalaz y 6.022 que estaban enfermos serán talados. "Pero las empresas constructoras, a cambio, tendrán que reponer 89.504 y mantenerlos durante dos años", afirma.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de febrero de 2005