El concejal de Cultura, Ferran Mascarell, se reunió ayer con representantes de las pequeñas salas de concierto de Barcelona para dar "un renovado impulso al sector de la música en vivo", según una nota hecha pública ayer por el Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB). "El Ayuntamiento está analizando la situación de las salas y la forma en que puede ayudar a encontrar medidas que permitan mejorar las condiciones de las salas y conseguir que el conjunto de la ciudadanía visualice la importancia que la música tiene en la riqueza cultural y la proyección de Barcelona", indicó Mascarell.
A la reunión asistieron los responsables de las empresas y salas Mas y Mas, Jazz-Sí, Harlem, Sidecar, Bikini y Apolo, además de representantes de la Asociación de Músicos de Jazz, Unión de Músicos, Consejo Catalán de la Música y de la coordinadora de las salas de música de Cataluña. El responsable de Sidecar, Roberto Tierz, indicó tras la reunión: "Ha sido una primera toma de contacto, pero por primera vez hemos encontrado un interlocutor y buena recepción. La música ha sonado bien y somos optimistas sobre el futuro porque se ha creado una mesa de trabajo y un calendario para ir resolviendo los diferentes problemas".
Entre las medidas que se estudían figura la mejora técnica de las salas y la rehabilitación de los locales para evitar molestias a los vecinos y mejorar al mismo tiempo su oferta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 17 de febrero de 2005