El jefe del Ejército bosnio durante la guerra anunció ayer que se entregará el lunes al Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), con sede en La Haya, después de que le fuese comunicada una orden de detención por las atrocidades cometidas por combatientes musulmanes extranjeros durante el conflicto (1992-1995).
Altos funcionarios del Gobierno bosnio criticaron el procesamiento del general Rasim Delic, considerado un héroe en Bosnia, como un intento de distribuir la culpa entre las tres comunidades que combatieron durante el conflicto: serbios, croatas y bosnios musulmanes, que sufrieron de lejos el mayor número de víctimas.
"Soy un hombre que luchó por su país, pero un hombre que cumple la ley como yo no puede actuar de otra forma", dijo Delic, de 56 años, a la televisión nacional.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 23 de febrero de 2005