"Éramos unos cuantos en la aldea, nos apañábamos con lo puesto, teníamos un buen pastizal para los animales, agua abundante, uvas y hortalizas, caza, leña, cereal en el secano y el trigal de las estrellas para los sueños...", dice el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, al comienzo de la Ley 6/2004, de 21 de diciembre, para la aplicación al municipio de Albacete del régimen de organización de los municipios de gran población, que "las Cortes de Castilla-La Mancha han aprobado y yo, en nombre del Rey, promulgo...", publicada el pasado 16 de febrero en el Boletín Oficial del Estado. A lo largo de casi dos páginas del BOE la ley cuenta muy cervantinamente la historia de "Albacete, esta urbe, con su Ayuntamiento al frente, cuya peripecia histórica, anecdótica y sentimental, hemos seguido en estas líneas, ha hecho méritos de sobra para convertirse en una gran ciudad".-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 24 de febrero de 2005