"En el último periodo, de las 757.000 viviendas construidas en España, unas 90.000 se han levantado en la Comunidad Valenciana y las hemos vendido todas", asegura el secretario general de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de la Comunidad Valenciana, Benjamín Muñoz. El dirigente alude a un estudio presentado recientemente por La Caixa, en el que se advierte que hasta 2011 la demanda media de viviendas en España se estabilizará en unas 500.000 anuales y una parte de éstas se levantarán en el litoral mediterráneo, sobre todo para dedicarse a segunda residencia.
"Está la demanda de los inmigrantes, de los extranjeros y luego hay toda una generación, la del babyboom del 68 que está adquiriendo ahora su primera residencia", agrega. Y falta, según Muñoz, la última gran explosión que será la puesta en marcha del AVE entre Madrid y la Comunidad Valenciana. "La alta velocidad entre Madrid y Sevilla ha duplicado la construcción de viviendas en la capital andaluza y aquí se espera un fenómeno parecido", observa.
Muñoz no se siente preocupado por la presión urbanística de todos estos proyectos sobre el territorio valenciano y para ello se refiere a las últimas cifras sobre ocupación que ha proporcionado la consejería de Territorio y Vivienda y que afirman que se está por debajo de la media. "Además, hoy por hoy, existen leyes reguladoras de la actividad urbanísticas y se sabe lo que se puede ocupar y lo que no", añade.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de marzo de 2005