El candidato a lehendakari por Ezker Batua-Berdeak, Javier Madrazo, advirtió ayer a sus socios de Gobierno del PNV y EA de que la eventual reedición del actual Ejecutivo tripartito no será posible sobre el eje de un plan Ibarretxe que, según dijo, "hay que superar" para la próxima legislatura. En el acto de presentación de candidaturas para las próximas autonómicas, celebrado en Bilbao, el coordinador general de EB y consejero de Vivienda y Asuntos Sociales anunció que para repetir esa fórmula de gobierno su partido pondrá "como condición sine qua non" alcanzar un pacto "sobre un nuevo modelo de convivencia" distinto al de la propuesta de Nuevo Estatuto aprobado por el Parlamento vasco el pasado 30 de diciembre con tres votos de los herederos de la ilegalizada Batasuna. Un marco que sustituya y supere al definido en el plan Ibarretxe, y en "en el que toda la sociedad esté a gusto, no sólo los nacionalistas" .
La diferencia entre ciudadanía y nacionalidad que se incluye en él, argumentó Madrazo, "abre una puerta peligrosa que puede acabar en la distinción entre ciudadanos de primera y de segunda", frente a la que propuso una única ciudadanía que incluya a todos. Defendió, por ello, que a partir del 17 de abril se inaugure una nueva etapa política "con una mesa de diálogo entre todos los partidos", para llegar a un punto de encuentro entre nacionalistas y no nacionalistas.
Ezker Batua, dijo, apuesta por volver a formar un gobierno a tres bandas, pero recalcó que su base constitutiva no podrá ser el plan Ibarretxe, aunque así figura en el programa electoral de la coalición PNV-EA, que se ha comprometido a convocar una consulta popular sobre el mismo en la próxima legislatura. A pesar de afirmar que su proyecto propio es el federalismo de libre adhesión, Madrazo y su partido han secundado todo el desarrollo del plan Ibarretxe.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de marzo de 2005