El director general de la Policía, Víctor García Hidalgo, anunció ayer en el Senado que la tasa de delincuencia en las ciudades descendió en enero un 2,29% respecto a ese mismo mes del año anterior, en el que el PP estaba al frente del Gobierno. García aprovechó este dato positivo para señalar, frente a las críticas del senador del PP Ignacio Cosidó, que estas cifras "confirman una tendencia a la baja de la actividad delictiva".
García Hidalgo dibujó en su primera comparecencia en el Senado -el PSOE destacó que el último responsable de la policía con el PP, Agustín Díaz de Mera, nunca acudió a la Cámara alta- un mapa de las zonas con mayor delincuencia. Entre ellas destacan el "arco mediterráneo" -especialmente Barcelona, Sevilla, Málaga y Alicante- y Madrid. Los delitos y faltas cometidos en esta última comunidad suponen el 27,48% del total. García Hidalgo destacó la reducción de algunos delitos muy significativos, como el robo de vehículos (13,49%), tirones (13%) o asesinatos (10,41%).
El director de la Policía también habló de las "nuevas formas de delito". Entre ellas destacó la duplicación de tarjetas de crédito, que va en aumento, o la sustracción de teléfonos móviles, que generó 160.859 denuncias en 2004.
En lo que se refiere a la lucha contra el tráfico de seres humanos, una de las novedades detectadas consiste en un cambio de las rutas utilizadas por las mafias, que se han desplazado hacia Almería, Murcia e incluso Baleares, y el uso de barcos nodriza con varias pateras a su cargo para rentabilizar el viaje, e incluso el de enormes cargueros llenos de personas. Por otra parte, las denuncias por malos tratos en el ámbito familiar aumentaron un 50,65% en 2004, según García Hidalgo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 8 de marzo de 2005