El Ayuntamiento de Lleida, gobernado por el PSC, ERC e ICV, aprobará el nuevo proyecto modificado de ciudad deportiva que promueve la Fundación Lleida Bàsquet en el barrio de Nova Balafia y que se encuentra encallado desde hace casi dos años debido a la fuerte oposición de una plataforma vecinal. Estos vecinos no aceptaron el equipamiento presentado inicialmente -un edificio de varias plantas y 22 metros de altura- por razones de volumen y de impacto visual.
La Fundación Lleida Bàsquet presentó ayer a los grupos políticos del consistorio y a los vecinos un nuevo proyecto que incorpora muchas de las alegaciones del colectivo opositor y que supone una reducción sustancial de sus dimensiones iniciales. Las modificaciones introducidas afectan a la altura del edificio, que se rebaja de 22 a 12 metros. Además, la separación con los edificios colindantes pasa a ser de 21 metros y se eliminan 140 plazas de aparcamiento.
El alcalde de Lleida, el socialista Àngel Ros, agradeció el esfuerzo realizado por la entidad deportiva para satisfacer las demandas vecinales y desbloquear el conflicto. Ros explicó que la modificación beneficia a los vecinos del solar en el que se construirá la instalación y al resto de la ciudad, ya que permitirá incorporar nuevos espacios de uso público y ganar 1.146 metros cuadrados de zona verde. Además, la calle de Olondriz será peatonal y el consistorio obtendrá la cesión de una de las pistas del complejo durante 20 horas a la semana. Los cambios no afectan a la superficie de uso comercial, que será de 2.000 metros cuadrados y sin los cuales el equipamiento no sería viable económicamente.
El proyecto original contaba con un pabellón de baloncesto con tres pistas transversales, una sala polivalente para realizar actos culturales y sociales, una sala de estudio y biblioteca, un espacio de ocio, un museo y un restaurante. En una segunda fase el equipamiento será dotado de una piscina cubierta, una sala de gimnasio-fitness y una residencia para los jugadores más jóvenes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de marzo de 2005