Las bolsas europeas vuelven a mostrar un comportamiento lateral en una semana más corta de lo habitual y logran evitar el efecto negativo del repunte que se produjo en la curva de tipos de interés tras el comunicado de la Reserva Federal. Con las revalorizaciones de las compañías de automóviles, de viajes y ocio o de telecomunicaciones volvemos a observar cierto sesgo procíclico que contrasta con las cesiones que se han producido en el sector de los recursos naturales y el de la energía, este último penalizado por el descenso en los precios del petróleo. Al mismo tiempo, la revalorización del dólar ha sido beneficiosa para las exportadoras.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 27 de marzo de 2005