La exposición El imperio azteca se ha convertido en el gran reclamo del Guggenheim para atraer visitantes esta Semana Santa. El arte y la cultura que los conquistadores españoles encontraron en su llegada a México en el XVI está representado con más de 400 piezas de la vida cotidiana, joyas y piezas rituales y religiosas de los aztecas y sus enemigos del imperio tarasco. Como contrapunto, los visitantes, que ayer guardaron largas colas ante el museo bilbaíno, también pueden disfrutar de la obra de Yves Klein.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 27 de marzo de 2005