Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

La crisis de Ferrys apunta a un fuerte recorte de empleo y a deslocalizar

La textil Ferrys atraviesa por una fuerte crisis con muchos capítulos. El que vive en la actualidad puede suponer un fuerte recorte de plantilla, según diversas fuentes consultadas presentes ayer en la reunión mantenida en el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). La reunión contó con cerca de 30 personas entre representantes de los tres sindicatos de la empresa -SI, CC OO y UGT-, dos representantes de la dirección y el director del IVF, Enrique Pérez Boada. La firma cuenta con dos centros de trabajo, en Benifaió y Canals, y emplea a algo más de 500 trabajadores.

Tras la reunión, UGT-PV manifestó que Pérez Boada "ha dejado claro que la única alternativa" viable para garantizar el futuro de la firma es deslocalizar producción. El IVF negó esas declaraciones. Otras fuentes consultadas, sin embargo, explicaron que la posibilidad de externalizar parte de la producción se "deslizó" en el encuentro. Ferrys ha presentado un concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos), pendiente de aceptación. La intención es reducir mediante una quita la fuerte deuda que arrastra con las distintas administraciones. El proceso incluirá un plan de viabilidad que conllevaría un recorte de empleo. Ayer, el IVF defendió que sigue apostando "por el futuro de Ferrys".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 6 de abril de 2005