La madrugada fue larga en Bilbao. El triunfo sobre la Real en San Mamés, concluido a las 12 de la noche, mandó al personal a la cama, tarde, muy tarde. Doce horas después, a las 12 del mediodía de ayer, las chicas del Athletic volvían a San Mamés con la posibilidad de ganar por tercera vez la Superliga o, en su defecto (si el Levante ganaba en Oviedo, que ganó), sumar goles y más goles frente al Sabadell (6-1) hasta hacer imposible una hecatombe final. Antes del partido, 70 operarios trabajaron por la noche para dejar en condiciones el campo tras el partido de la víspera. Incluso el Ayuntamiento se puso al servicio del Athletic enviando los pertinentes camiones de basura para recoger los desperdicios del derby.
A las 12 en punto del mediodía, el equipo femenino rojiblanco se puso manos a la obra en su imperiosa necesidad de ganar y, además, marcar goles. Y como si fuera un ejercicio cabalístico pudo conseguir 12, por ejemplo, a juzgar por el aluvión de oportunidades, que por momentos desataron una tímida ola en las gradas de la Catedral. Fuera por la resaca del derby, o por el frío, o por el factor anímico de que la Superliga si se consigue será en Barcelona (contra Marigol y compañía), lo cierto es que el público no acudió de forma tan masiva como ante el Puebla (25.000) o Hispalis (35.000) hace dos temporadas o ante el Torrejón (20.000) la pasada campaña. Ayer, 9.000 personas poblaron una tribuna y asistían a un festival goleador que se quedó a la mitad de lo posible. Seis goles lograron las rojiblancas; tres de Erika Vázquez, una navarra de 22 años fichada del Lagunak, que lleva anotados 26 goles en 25 partidos y que se ha convertido en la auténtica sensación (más allá de lo mediático) del fútbol femenino español.
El Athletic volverá a ser campeón si el domingo gana o empata en Barcelona, e incluso si pierde. Si empatan a puntos (el Athletic tiene tres de ventaja con el Levante, que se enfrenta al Sevilla), las rojiblancas gozan de cinco tantos más en el gol average general, elemento decisorio ya que los partidos entre ambos equipos se saldaron con dos empates.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 11 de abril de 2005