En su interesante obituario del escritor norteamericano y premio Nobel Saul Bellow se dijo que el primer idioma suyo era el hebreo. Esto es incorrecto. Bellow, de padres judíos emigrados de Rusia, nació en Canadá en 1915. En esa época nadie en Norteamérica, judío o no, hablaba hebreo. Es más: ni siquiera en la época de Jesús los judíos hablaban hebreo, salvo en las sinagogas, sino arameo.
Los judíos procedentes del este de Europa y Rusia hablaban yídish. Por tanto, el primer idioma de Saul Bellow fue el yídish.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de abril de 2005