Allá por la década pasada dieron en llamar Los Nuevos Juglares al colectivo madrileño de nuevos cantautores que nació al calor de locales señeros como Libertad 8, Café Garibaldi o El Búho Real. Eran trovadores como Moncho Otero, Luis Felipe Barrio y Matías Ávalos o, claro, Ismael Serrano, al que más le ha sonreído la fortuna. Y es el propio Serrano quien ha querido apadrinar la reaparición de uno de aquellos jóvenes valores, Antonio de Pinto, que ahora vuelve a la carga con un disco cargado de lirismo e ironía. Lleva por título Currículum y lo ha grabado el propio Ismael en su estudio particular, Los Paraísos Desiertos, con Antonio Toledo de productor. Entre sus 14 canciones será casi imposible no reparar en títulos como Nueve minutos y medio, sobre un fugaz encuentro amoroso con un repartidor a domicilio, o, sobre todo, Canción a mi cola. En efecto, se trata de una oda al aparato reproductor masculino con versos como "es la fuente de mis alegrías, por darle gusto te amo. / Guerrera y firme en tu alcoba, triste si hemos terminado".-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 20 de abril de 2005