Encuentro desproporcionada la polémica que se ha generado en torno a las nuevas zonas verdes para aparcar.
Por una vez, tengo que decir que estoy de acuerdo con los responsables del Ayuntamiento. La calle es de todos, y no entiendo que alguien tenga que utilizarla como un aparcamiento al aire libre o como un almacén de coches.
Encuentro bien que se quiera regular su uso, y el precio de un euro semanal para los vecinos es absolutamente simbólico. Sobre todo si con esto conseguimos disminuir el tránsito y recudir la indisciplina, como aseguran los responsables municipales; si es así, habremos ganado mucho. Y si no, miremos que hacen ciudades como Londres o Roma, que ponen un peaje o cierran el centro al tráfico rodado. Sin ir tan lejos, en Madrid mismo funciona desde hace años este sistema, que ahora su alcalde quiere ampliar a todo el municipio. En ninguna de estas ciudades se ha levantado tanta polvareda como aquí.- Maite Lorente Atenza. Barcelona.
Una vez más los ricos ganan y los pobres perdemos. Gracias al Ayuntamiento teníamos problemas para acceder a una vivienda digna; ahora, por la nueva normativa, también tendremos problemas para aparcar nuestro vehículo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 2 de mayo de 2005