Según el diccionario de la Real Academia Española, enfermera/o es aquella persona dedicada a la asistencia de los enfermos. Lamentablemente sólo hay que ingresar como paciente en el Hospital La Fe de Valencia, para comprobar cómo la vocación de la enfermera/o se ha diluido. En sus pasillos impera la ley del mínimo esfuerzo. La atención al paciente se vuelve hostil e inoperante. Se podrían dar nombres y apellidos, nunca se puede generalizar, pero es tan triste y decadente que carece de sentido. Se ha perdido la vocación. La realidad del día a día alimenta la beligerancia contra el paciente. Una acritud que contribuye a desprestigiar la sanidad pública ¿Qué está pasando? ¿Hay masificación en la sanidad financiada por la Administración? ¿Se ha perdido la vocación? ¿Se ha roto el código deontológico? No son preguntas retóricas. Son cuestiones para que reflexionemos en voz alta..
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 3 de mayo de 2005