Acaba de celebrarse la VI edición del Festival de Cine Inédito de Islantilla. Para algunos, un éxito: marco incomparable, lujo y glamour a costa de patrocinadores y erario. Entre quienes tienen motivos para felicitarse no nos encontramos los alumnos y profesores del I E S Padre J. Mirabent, de Isla Cristina que en la mañana del 20 de abril asistimos al certamen, y que fuimos víctimas del caos organizativo y de una estafa: la proyección de la película Fortunata y Jacinta, de A. Fons, con tan lamentables condiciones técnicas de sonido e imagen que ni en un uso doméstico hubieran sido admisibles. Otros seguirán disfrutando del Festival de Cine de Islantilla en sucesivas ediciones, y cantando sus bondades. Nosotros, sencillamente, no volveremos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 6 de mayo de 2005