Dolli Sonia M. L., de 50 años y nacionalidad boliviana, que ayer a las 17.15 horas se hallaba sentada en un banco de la avenida de Borbón en el cruce con el paseo de Maragall de Barcelona, murió atropellada por un coche que, tras subirse a la amplia acera y derribar una fuente, la arrolló.
El conductor del coche, un Ford Fiesta, y su acompañante se dieron a la fuga. Avisada la Guardia Urbana, una patrulla policial, advertida por un testigo presencial del mortal accidente, localizó al presunto autor del atropello en una calle cercana al lugar de los hechos media hora después del siniestro. El supuesto homicida opuso resistencia a los agentes, que tuvieron que reducirlo y esposarlo. Se trata de Carlos Eduardo M. R., de 36 años, que tiene antecedentes penales y policiales. Sin oficio conocido, el detenido, que conducía el coche de su madre, dio negativo en el control de alcoholemia al que le sometió la Guardia Urbana y tampoco presentaba síntomas de haber consumido drogas
Tras el accidente, el coche quedó muy maltrecho, y por las características del siniestro, todo hace pensar que circulaba a una velocidad muy elevada.
La Guardia Urbana tiene varios testigos que acusan al detenido de conducir el coche en el momento del siniestro y busca ahora al acompañante, a quien no se acusa de nada, para acabar de esclarecer el caso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de mayo de 2005