La presidenta regional, Esperanza Aguirre, aseguró ayer que es imprescindible que "cada palo aguante su vela" y reclamó al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero la construcción de la R-1 y el cierre de la M-50 con el fin de que los vecinos del norte de la Comunidad de Madrid no se encuentren "absolutamente aislados".
Aguirre, que ayer presidió el Comité de Dirección del PP de Madrid, que se reunió en San Sebastián de los Reyes, expresó el compromiso de su Gobierno con el norte de la región y subrayó que en San sebastián de los Reyes tendrá su sede el hospital del Norte y que, además, contará con Metronorte y con 43 agentes del Proyecto de Seguridad.
Destacó que, frente a la actuación del Gobierno regional, el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero, responsable de las infraestructuras nacionales, "tiene completamente abandonada la zona". "Todos los ciudadanos que tienen que utilizar la A-1 comprueban la situación de colapso absoluto sin que ni siquiera se haya completado un 15% de las infraestructuras del norte de la región de los PAU [Sanchinarro, Montecarmelo, Las Tablas], Alcobendas, San Sebastián, San Agustín de Guadalix o Algete", aseveró.
La presidenta del PP reiteró que es "imprescindible" que se construya la R-1 y el cierre de la M-50, "porque sin ellos los ciudadanos estarán absolutamente aislados de la Comunidad".
Deberes hechos
Aguirre añadió que la Comunidad de Madrid "ha hecho sus deberes y ha puesto en marcha el Metronorte". Por este motivo, pidió que el Gobierno central "ponga inmediatamente en marcha la R-1 y el cierre de la M-50".
Por su parte, el portavoz del PP en San Sebastián de los Reyes, Manuel Ángel Fernández, pidió a los vecinos que comparen entre la gestión de la Comunidad y la del Ayuntamiento, gobernado por el socialista José Luis Fernández Merino. "Las obras del Ayuntamiento son un absoluto desastre y con la Comunidad por lo menos se van cumpliendo las fechas", concluyó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de mayo de 2005