El juez de Instrucción número 14 de Madrid, Carlos Valle, tomó ayer declaración como testigos al delegado del Gobierno, Constantino Méndez, y a dos mandos policiales que investigaron el incidente del pasado 22 de enero, cuando fue supuestamente agredido el ministro de Defensa, José Bono, durante la manifestación de la Asociación de Víctimas del Terrorismo. Posteriormente fueron detenidos dos militantes del PP de Las Rozas (Madrid).
Méndez, que hizo uso de su derecho a declarar en su despacho, fue interrogado durante dos horas. Declaró que él no ordenó ninguna detención, sino que se limitó a ordenar a la policía que intentase aclarar lo ocurrido.
Posteriormente declararon el comisario Rodolfo Ruiz, jefe de la Brigada Provincial de Información, y el jefe del grupo de Conflictividad Social de Madrid, que fue quien instruyó las diligencias. Ambos dijeron que, cuando el delegado del Gobierno anunció las detenciones, el 24 de enero, no había ninguna persona identificada, por lo que creen que se trató de un mero cálculo de probabilidad, informa Europa Press.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 14 de mayo de 2005