En los límites de Osona y la Garrotxa, con un tiempo primaveral, 3.500 ciclistas participaron ayer en la decimotercera edición de Cabrerès BTT, la tercera prueba de bicicleta de montaña más importante de Europa. Los participantes pudieron escoger entre tres recorridos, de 35, 55 y 70 kilómetros, que discurrieron por los municipios de Santa Maria de Corcó, Tavertet y Rupit. Además, los ciclistas pudieron participar en otras actividades paralelas, que comenzaron ya el sábado; entre ellas, una prueba especial destinada a los más pequeños y una feria de productos relacionados con el mundo de la bicicleta de montaña. La dureza de la jornada tuvo su recompensa: al acabar la prueba, un equipo de masajistas esperaba a los participantes para ayudarles a relajar las piernas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 16 de mayo de 2005