El equipo de gobierno del PP aprobó ayer otras tres licencias de derribo que afectan al barrio de El Cabanyal, decisión que rechazó la oposición. El portavoz socialista, Rafael Rubio, calificó de "absurdo" y de "ataque a la inteligencia" que se aprueben las licencias después de que un juzgado haya decretado la suspensión cautelar de la demolición de una de las casas afectadas del entorno BIC de El Cabanyal. El teniente de alcalde, Alfonso Grau, replicó que esas tres licencias "no están recurridas" y "no hay razón para retirarlas". También en relación con el plan para prolongar la avenida de Blasco Ibáñez, el PP impuso su criterio para modificar los estatutos de la sociedad Cabanyal 2010, de modo que el capital mínimo de las empresas privadas sube de 30.000 a 200.000 euros, lo que para el PSPV y EU cerrará el paso a pequeños empresarios y a Salvem El Cabanyal. Grau contestó que si el colectivo no logra el dinero "se califica solo". Los cambios de estatuto permitirán dar entrada en el consejo de administración a los socialistas, pero no así a EU, que criticó la decisión. Rubio rechazó la nueva sociedad y justificó su participación en que "es un derecho" del grupo municipal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 17 de mayo de 2005