El San Juan a punto estuvo de reventar de los tantos que nos dimos cita la noche del martes. Se trataba de recaudar fondos para la familia del fallecido trombonista y compositor cubano de latin-jazz Juan Pablo Torres. Salieron primero los Niños de Candeal, famosos por la película de Trueba, con sus tambores de lata, sus pies descalzos y su desparpajo. Una docena de mocosos que atizan los cueros como si les fuera la vida en ello y terminaron por robarnos el corazón. Joshua Edelman y Conexiones, el mismo grupo que acompañó a Torres durante su última estancia en Madrid, interpretaron cinco piezas originales del homenajeado, incluyendo una extraordinaria Rumba del cajón. Cerró la noche Bebo Valdés en formación de cuarteto y con Javier Colina al contrabajo. Fue salir el octogenario pianista, a quien Torres acompañó en Bebo de Cuba, y armarse la marimorena. Primero, tocando su repertorio habitual -Cavatina, Romance en la Habana...-; después, dirigiendo la consiguiente sesión de timba, con Colina, Edelman y Conexiones y los peques de Candeal, todos reunidos sobre el escenario. Cada quien tocó lo que quiso y todos fuimos felices.
Para Juan Pablo Torres
Los Niños de Candeal; Joshua Edelman y Conexiones; Bebo Valdés. C. M. San Juan Evangelista, Madrid, 17 de mayo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de mayo de 2005