Siete años de prisión y la devolución del dinero sustraído ha sido la condena impuesta por la Audiencia de Castellón a una funcionaria del Ayuntamiento de L'Alcora por apropiarse de unos 250.000 euros que correspondían al pago de las tasas relacionadas con el impuesto de plusvalía y licencias de obras mayores y menores. La Sección Segunda ha condenado también al esposo de la funcionaria a 15 meses de prisión como autor de un delito de receptación.
La sentencia señala que la acusada, auxiliar administrativa del Ayuntamiento de L'Alcora, "concibió el propósito de beneficiarse" con el dinero que los contribuyentes y, para ello, se aprovechó del "perfecto conocimiento de la operativa de la oficina pública, de la confianza depositada en la misma por el tesorero, el interventor y el secretario del Ayuntamiento y de las múltiples posibilidades de ocultación e impunidad de sus actos".
Así, se apoderó de varias cantidades ingresándolas en cuentas corrientes que poseía junto a su marido. Los hechos ocurrieron entre febrero de 1994 y marzo de 1999. La mujer ha sido condenada por falsedad de documento oficial y malversación de caudales públicos, por el que se le imponen seis años de prisión e inhabilitación absoluta por 15 años, así como un año más de cárcel por el delito de infidelidad en la custodia de documentos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de mayo de 2005